¿Veis que fácil es? Seguro que os saldrá estupendo si seguís los pasos que os hemos comentado y podréis, así, sorprender a vuestros comensales con este riquísimo postre de vainilla.
Además, os voy a contar un truco: Si tenéis prisa, podéis meterlo directamente en la nevera, servido en vasitos como una crema fría y os permitirá servirlos de manera individual.
Espero que lo practiquéis en casa. Ya me contaréis el resultado de vuestro biscuit glaçé de vainilla.
Escribe un comentario