Tener doble cabeza ¡Menudo reto! Es lo que vive cada jornada Francis Paniego.
Restaurantes El Portal y Echaurren
Con cara de niño bueno, una sonrisa amable y mucho brillo en sus ojos, es una persona que vibra con su quehacer diario. ¡Menuda suerte!
Lo mismo “cocina” en la planta de arriba facturas, pedidos y papeles, y más papeles… que se encierra en su cubículo I+D donde su imaginación y técnica germinan y crecen. Y ésto sin desatender la cocina, con su parte tradicional y moderna.
Misma cocina para dos experiencias completamente diferentes
Lo viví dos días consecutivos. El jueves en El Portal: un viaje a la tierra, cultura y nuevas técnicas. Sin disfrazar los sabores ni al producto. Y el viernes en Echaurren: una imagen del buen hacer, la tradición, la amabilidad con el producto. Servicio a la antigua usanza, el publico de toda la vida y ese aroma de familia tan inconfundible que te hace sentir en casa.
Bravo para todo el equipo, dejáis un listón alto y un recuerdo que me acompañará mucho tiempo.
El Portal estrenaba su carta de temporada
Tan solo unas semanas de vida. Estructurada como si se tratara de una obra de teatro. Primera, segunda y tercera parte.
Juegos con los productos, trampantojos, tempuras, crujientes, producto, mucho producto de la tierra, guiños de la abuela, de la madre, a los sueños, a los viajes, al sol, a la lluvia, a la tierra, mucha tierra, gran tierra, y a la lana…
¡Qué sería Ezcaray sin lana!
Y vinos de Rioja, grandes, pequeños , premiados, desconocidos, blanco , rojo, temprano, tardío, «supuráo»… todo estaba allí.
Mucho más familiar, es Echaurren
Pimientos. Esos de la zona asados con aroma a leña, bocartes ¡qué bocartes! Alcachofas en plena temporada, pochas mantecosas, callos, los premiados tantas veces, postres que te llevan a la mesa camilla con su brasero…
Y más Rioja, ¿para que salirte de este trocito de tierra que tanto tiene que ofrecer?
Las imágenes hablan por sí solas.