En la Escuela de cocina TELVA apostamos por las clases de cocina presenciales, no solo para que aprendas, también para que comprendas lo que te enseñamos.
Las clases de cocina presenciales son un concepto básico en nuestra escuela de cocina. Es el mejor modo para que asimiles los nuevos conocimientos
Algunos dirían que parece absurdo acudir a clase en la era digital. ¡Si en Internet lo tenemos todo!
Y es cierto. En la Red abundan los tutoriales. Encontramos recetas y guías para desmontar un portátil y métodos de relajación por doquier. Un rato en Internet y te crees capaz de cualquier cosa. Y, si es posible… entonces ¿por qué acudir a clases presenciales?
Os lo razonaremos para que veas una serie de puntos «muy seductores» que marcan la diferencia.
Clases de cocina presenciales en la Escuela de cocina TELVA
- En la Escuela de cocina TELVA cocinamos, ¡y mucho! Casi como una excusa
- Tenemos una puerta mágica, que si la cruzas, hará que tus problemas se queden fuera. Aquí no entran. El 99% de los alumnos siempre nos cuentan que las clases de cocina presenciales, de manera sorprendente, ha resultado una terapia para ellos. Una alumna muy simpática nos dice que cuando le preguntan adónde va, ella siempre contesta “al psicólogo”, refiriéndose a nosotros. Es una experiencia maravillosa
- Hay que confesar que tenemos un recetario muy bueno, siempre actualizado, a la última y a la vanguardia de la cocina. Y ¡adaptado a todos los gustos!
- Cocina española
- Ideas «para diario»
- Cocina Internacional
- Cocina sana
- Ideas para recibir en casa
- Propuestas para niños
- Gastronomía por niveles…
- La diferencia fundamental: como se cocina al mismo tiempo que se explica, enseñamos todos, repito, todos los trucos que requiere cada receta o ingrediente. No nos dejamos nada en el tintero
Si se nos quema un caramelo te decimos cómo arreglarlo; si alguien no puede tomar huevo en casa, te orientamos qué otro ingrediente lo puede sustituir, y si os da miedo hacer una mayonesa, os levantáis y la hacéis hasta que salga… (¡o aprendéis a arreglarla!); Si queréis hacer una tarta espectacular la montamos, pero si preferís unos vasitos, adaptamos la receta sobre la marcha con resultados como este…
En fin, que nada como la práctica y el compañerismo.
Para entenderlo, hay que vivirlo.